La proforma presupuestaria del Municipio para el 2018 suma USD 1 539 millones, es decir, 11% más que la de este año. Sin embargo, alrededor de 70 millones menos recibiría la Empresa de Movilidad y Obras Públicas (Epmmop), según la propuesta que empezó a analizarse en la comisión del ramo. Otras reducciones se evidencian en otros rubros. Emaseo, por ejemplo, está en cero, debido a que está en marcha un proyecto para que sea una empresa autosustentable.

En el área de cultura hay recortes para la Fundación Museos de la Ciudad, el Centro Cultural Metropolitano y la Secretaría. Ahí se plantean modelos de autogestión para que aumenten sus ingresos. Según Miguel Dávila, administrador general del Municipio, estas son reducciones que forman parte de un ajuste general del presupuesto municipal. Este subirá debido básicamente a la mayor inversión para el Metro de Quito, que tiene financiamiento internacional.
Dávila añade que hay proyectos específicos que se espera financiar con un crédito internacional que está en análisis en el Concejo. Días atrás, el alcalde Mauricio Rodas convocó a una sesión extraordinaria para tratar este préstamo que alcanza alrededor de USD 80 millones, pero incluía el proyecto de Quito Cables, que no cuenta con apoyo entre los concejales. Según Dávila, se está trabajando en un acuerdo para definir qué proyectos entrarían en la lista para este crédito, aunque probablemente se excluirían los Quito Cables. El concejal Marco Ponce, presidente de la Comisión de Presupuesto, afirma que la proforma debe tener mayores certezas sobre los ingresos. De ahí que se prevén ajustes si el crédito llega a concretarse.
Según conoció la Comisión, la disminución en el presupuesto de la Epmmop se explica porque los gastos más fuertes ocurrirán este año, cuando se terminó de pagar, por ejemplo, por el intercambiador de Carapungo y la prolongación de la avenida Simón Bolívar. Otro cambio en el proyecto de presupuesto es el incremento para la Secretaría de Movilidad, que pasa de alrededor de USD 667 millones a USD 899 millones. En cambio, la Agencia Metropolitana de Tránsito baja de USD 82 millones a USD 64 millones.
La movilidad es uno de los temas prioritarios para la Alcaldía, tomando en cuenta que tiene tareas pendientes como la implementación del sistema inteligente de transporte y la reorganización de rutas y frecuencias, que son requisitos necesarios antes de que opere el Metro de Quito. Un incremento importante en el presupuesto es el rubro destinado a la Alcaldía, que pasa de USD 1,7 millones a USD 4,6 millones.
Según Ponce, la Administración explicó que se debe a que los salarios municipales y de varias unidades pasaron administrativamente a la Alcaldía. En ese monto se incluye un presupuesto para jubilaciones. Además, Dávila señaló que había contratos por prestación de servicios que estaban excluidos y que al incorporarlos en la pro forma terminaron por sincerar las cuentas. En la sesión del lunes pasado, los concejales presentaron inquietudes por la inversión destinada al área social. Dávila señaló que una inquietud de los ediles de AP fue el dinero destinado al Patronato San José, que pasó de 23,1 millones a 23,3 millones. Según el Administrador, es una de las unidades más eficientes en ejecutar el presupuesto. La Administración debe enviar más información a los ediles con respecto a este y otros puntos.
La Comisión debe conocer el presupuesto hasta el 20 de noviembre y el Concejo, hasta el 10 de diciembre. El concejal Jorge Albán (AP) pidió más información sobre la fuente de los ingresos. Tiene dudas, por ejemplo, de las cuentas por cobrar que el año pasado eran de USD 97 millones y ahora USD 156 millones. En contexto El Cootad dispone que la comisión encargada emita un informe sobre el presupuesto hasta el 20 de noviembre de cada año. El Concejo, por su parte, tiene plazo hasta el 10 de diciembre. Si expira el plazo y no se aprueba el presupuesto, entra en vigencia.
Fuente: www.elcomercio.com